viernes, 18 de mayo de 2012

Cristo tuerto, Cristo ciego.

En esta tarde subirás lo más alto del cerro, portando una corona de espinas donde cada herida que aflige derrama una gota de esperanza y fervor.
Pesa menos ser ciego que ser tuerto.
Derramas lágrimas de fuego en la oscuridad.

Tu fé, traicionada.
Procesión de rodillas que dirige a donde hiere más la pena que la herida.

jueves, 17 de mayo de 2012

Descripción en un diecisiete de mayo.

En la cabeza yace el sagrado recinto de los pensamientos: la mente. Templo corrupto y deteriorado del ser.
Está adornada con pasillos para la exploración de ideas y recuerdos como si fueran las memorias una galería de arte decadente, donde el público es representado por un rostro que produce una mueca como si le dieran suaves bofetadas.

Mantienes la boca y los ojos cerrados para no decir. Mantienes tu corazón cerrado para no sentir.

Frunce el ceño y permanece inmóvil. El cuerpo es un cacharro minúsculo y contraido como la figura de un animal cuadrúpedo en posición defensiva.

Liberas descargas eléctricas del interior de tu espina dorsal al contorsionarte con violencia.

lunes, 7 de mayo de 2012

No vencerás.

La colisión con nuestras emociones nos ha obligado a redefinir la concepción de nuestro ser.
Reconstruir cada pieza esencial de nosotros.

Noema o noesis.
¿Ser en-sí o para-sí?
¿Ser en-sí y para-sí?

Tus vanos estándares de belleza no podrán contra nuestra nueva visión.
Tus burdos estandartes de belleza no podrán contra esta nueva creación.